Lo que puso en su cuenta el editor de diario El Comercio respecto del ‘reclamo’ para que los periodistas reciban las dosis de vacunas es real. Puede ser legítimo el pedido, pero lo raro es que en el costal no son todos los que están, ni están todos los que son. Los que más reclaman son los que casi nunca -o nunca- han hecho reportería, no conocen ni cuál es el ingreso principal a los hospitales, no saben lo que es una cobertura en medio del riesgo, no han tomado contacto presencial con las autoridades de salud, pero si hacen “entrevistas” desde los escritorios o nunca salen de sus vanidades. No hemos visto que los verdaderos reporteros estén rogando vacunas. De los otros… quizá ya se vacunaron.