Al paso que vamos es indudable que la Fiscalía y la Contraloría del Estado tendrán mucho trabajo. Con cinismo y desparpajo, los contratos que encierran corrupción están a la orden del día y ha sido la clase periodística y no la clase política la que ha puesto en evidencia muchos casos, que en medio de la emergencia sanitaria por culpa de la Covid, se han manipulado en favor de siniestros personajes que no han medido sus apetencias de dinero mal habido. Los organismos de control, deberán efectuar un análisis de los contratos que se han hecho en tiempos de pandemia en todas las entidades. A pretexto de “ayuda social”, seguro que se hallarán sorpresas. El país espera que la justicia brille.