Las acciones que, desde los momentos difíciles que ha soportado el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), emprendan los directivos nacionales y provinciales, deben generar confianza, porque a la final de lo que se trata es de salvar a la institución de los fallidos presuntos intentos, hasta ahora, de desaparecerlo. En estos momentos, delicados y de afectaciones por las crisis, los afiliados, jubilados, pensionistas confían en que las nuevas administraciones van a enfrentar las confusiones, caos y corruptelas con sentido de país, para no afectar a los miles de ciudadanos que dependen de sus servicios y de sus atenciones. El IESS requiere ser recuperado por completo por parte del Estado.