Primer Papa Latinoamericano
Ayer fue un día de gran expectativa en el planeta y de gran motivación para la iglesia Católica. Los ojos del mundo se posaron en la Capilla Sixtina para mirar con júbilo la aparición del nuevo Papa Francisco I. Jorge Mario Bergoglio, este jesuita argentino, hijo de padres italianos, para sorpresa de muchos, fue el elegido.
El cónclave para elegir al papa número 266 de la historia de la Iglesia Católica y obviamente el sucesor de Benedicto XVI, se dio en medio de una multitudinaria presencia de fieles, religiosos, creyentes y autoridades del mundo que veían con gran ilusión la designación del nuevo líder mundial de la iglesia Católica, mismo que deberá tener a esta hora un conocimiento pleno de la bondades que su dignidad representa, pero al mismo tiempo la difícil tarea para enfrentar los malos momentos que ha enfrentado la iglesia en los últimos tiempos. Si bien el cónclave arrancó sin un candidato favorito, y se habló incluso de división entre cardenales, las deliberaciones y las rondas de votación secreta permitió que salga humo blanco, signo de que el mundo cuenta con un nuevo Papa, mismo que se inscribe en la historia por ser el primer latinoamericano en asumir la delicada tarea de evangelizadora.