La cultura está en la base de todo
Todas las vivencias, que tiene un pueblo, que no sean producto de la misma naturaleza, conforman ese bagaje de experiencias y expresiones, que se llama Cultura. Prácticamente, no hay día, ni mes en el año, en el que no estén presentes distintas vivencias, costumbres y manifestaciones artísticas, que son las muestras vivas de su identidad. Por eso, es de profunda importancia que se dé el relieve necesario a todo lo que significa este ámbito, puesto que, prácticamente, todo está dentro del concepto de Cultura. No olvidemos que el ser humano lo que hace es transformar lo que la naturaleza le ofrece, para convertirlo en productos, que tienen su impronta y su huella, como la marca que le da a cada uno de ellos.
Por eso, podemos hablar de la Cultura de uno u otro pueblo, porque, en cada uno de ellos, existe una clara demostración de su característica y autenticidad, que los diferencia de los demás. De igual forma, podemos encontrar que, en las distintas épocas de la Historia de la Humanidad, se dieron diferentes formas de expresión cultural, que caracterizaron a cada una de ellas. Nuestros pueblos, inmersos en estas corrientes culturales, lo que han hecho es heredar, en primer término, y luego transformarlas, dándoles un carácter propio, fruto, muchas veces, de un mestizaje, que enriqueció esas expresiones originales.
Esto es, justamente, lo que hemos vivido en el Día de Difuntos, que acabamos de pasar, y que es una muestra clara de lo que acabamos de expresar. Y, como este, hay tantos y tantos más.