Gerente de UNACEM: “Los GAD deben reorientar planes de acción estratégicos”
La empresa cementera, hoy llamada UNACEM, tiene una permanencia de 40 años en Imbabura, consolidando su producto “Selvalegre” como uno de los de mayor calidad que ha sido utilizado en obras emblemáticas como el Metro de Quito, el aeropuerto Mariscal Sucre, el multipropósito Baba, Central Manduriacu “y eso es motivo de orgullo para los imbabureños al saber que la materia prima que se procesa, se genera aquí y la mano de obra local hace este producto”, señaló Diego Moreno, gerente de planta de UNACEM que estuvo en ENtv para destacar el convenido suscrito en favor del medio ambiente con cuatro de los GAD cantonales y la Prefectura de Imbabura.
¿Unacem es compañía con capitales peruanos?
Sí, desde el 2014 somos parte del Grupo UNACEM que es una empresa de Perú pero tiene operaciones a lo largo de América Latina y Estados Unidos. Nuestras operaciones en Imbabura incluyen las canteras de Selva Alegre, esa es la razón de nuestra marca comercial, pero nuestra área de influencia está en los cantones Otavalo y Cotacachi.
¿Esa percepción de contaminación ha cambiado?
Toda actividad humana tiene un impacto ambiental, pero la opción más ecológica tiene un impacto ambiental, inclusive en nuestro propio metabolismo.
¿Hay un marco regulatorio?
A nosotros nos regula el Ministerio del Ambiente, el GAD provincial y las secretarías de los GAD cantonales. Tenemos un marco legal y para tener una idea, el nuestro es muy comparable con la legislación europea. Nosotros no actuamos solo por los umbrales legales, sino por la percepción de comodidad de los vecinos, porque al final del día nosotros nos sentimos integrantes de la sociedad imbabureña.
¿Su zona de influencia se mantiene?
Operamos en las comunidades de Gualsaquí, Quichinche, en Perugachi que está al frente de nuestra fábrica, en Selva Alegre, Vacas Galindo y con todas ellas tenemos un plan de relacionamiento intensivo.
¿El personal que labora?
En la fábrica no llegamos ni a 200 personas juntando todos los turnos y simultáneamente en la fábrica no hay más de 50 o 60 personas.
Háblenos del convenio con los GAD de Imbabura…
Todos lo cantones de Imbabura tienen un aspecto logístico fantástico y son complementarios. Por ejemplo el residuo que genera Antonio Ante que es una sociedad artesanal y textilera es muy diferente a lo que genera Otavalo, Cotacachi o Ibarra. Las cantidades son directamente proporcionales a la población y por tanto Ibarra es el que mayor disposición tiene.
¿Cuánto desperdicio se genera?
Si juntamos los desperdicio de los 4 cantones que son parte del convenio, hay alrededor de 300 toneladas en el día.
¿Por qué es importante el convenio?
Porque se va a construir una economía de escala que no solo debe ser sostenible desde el aspecto ambiental que por supuesto lo es, sino también desde el aspecto social y económico.
¿Qué se requiere?
Lo primero es homologar estos aspectos y necesitamos que cada GAD reoriente sus planes de acción estratégicos hacia un producto que se deja de llamar residuo cuando se clasifica en sus orígenes, se retiran los valuables, se extrae el material orgánico y todos los municipios deberán hacer estas acciones separadas, pero alineadas que empiezan con la clasificación en su origen. Eso significa que los municipios tienen que cambias los planes respecto de la clasificación de desechos en los próximos años.
¿Unacem tiene capacidad?
Nuestra planta tiene el potencial de reemplazar hasta el 40 % de combustibles alternos y este número no lo ha conseguido ninguna otra planta en todo el hemisferio occidental.