Encuentran a adolescente muerto en el baño de su casa
IBARRA. María Ch., abraza a uno de sus hijos y llora descontrolada junto a la puerta de la morgue del Hospital San Vicente de Paúl. Ella perdió a su otro vástago, al menor, al alegre, el que por causas del destino ya no llegará a casa. Stalin, quien en abril cumpliría 17 años de edad le dijo adiós a este mundo terrenal y ahora los suyos esperan resignación y una respuesta del por qué sucedió aquello.
Testimonio. Mi hijo era tranquilo, le gustaba hacer actividad física, soñaba con ser soldado y estaba estudiando en el colegio, pero la madrugada de hoy (ayer) mi esposo le encontró muerto en el baño dice María, mientras se observa brotar lágrimas de sus ojos que caían hasta el piso, como la mirada de su otro el hijo, el cual no podía asimilar de que su hermano Stalin les haya dejado solos, pues partió de este mundo a tan temprana edad y de forma sorpresiva.
Piden una respuesta. Mientras los familiares del joven que yacía al interior de la morgue esperaban sacarlo del anfiteatro y llevarlo a su natal Caluquí Bajo (Otavalo), en donde le darían cristiana sepultura. Su madre esperaba una respuesta que le diga qué o cuáles fueron las causas para que su Stalinca, como le decían de cariño ya no esté con vida.
Yo con mi esposo jamás pensamos que esto sucediera, el miércoles nos fuimos a Saquisilí a vender mercadería y regresamos el jueves entre eso de las 10:00 de la noche, en ese momento pensamos que nuestro hijo estaba durmiendo al igual que sus hermanos y nos fuimos a descansar, dice María mientras alza su mirada al cielo, como pidiendo una explicación al creador. Nuevamente toma fuerza, respira, trata de observar al interior de la morgue, pero no lo hace y continúa su relato.
Lo último que hemos podido saber es que tuvo una discusión con unos jóvenes del colegio en el que estudia y que inclusive habría sido expulsado del mismo, eso es lo único que sabemos, dijo. El cadáver fue en primera instancia llevado a la morgue del hospital de Otavalo y luego al de Ibarra.