Colectivos en contra de agricultura transgénica
Ibarra. Colectivos agroambientales han declarado su lucha contra los transgénicos (organismos modificados) en los cultivos. Estas acciones, según afirman, se suman a la defensa de la soberanía alimentaria pues aunque en la Constitución se prohibe su uso, un reciente reglamento del Código Ambiental pretende legalizarlos.
En contra. Elizabeth Bravo, de la organización Acción Ecológica, dice que Ecua-dor fue declarado Libre de Semillas y Cultivos Transgénicos por la Constitución de Montecristi, y prohibió de manera específica, el ingreso de transgénicos que atenten contra la soberanía alimentaria, los ecosistemas y la salud de los ecuatorianos. “Ahora lo que se pretende es que cumplan con una serie de papeles que se pide a países que ya tienen millones de hectáreas con transgénicos, por ejemplo en Argentina. Se pide esto pero realmente es un requisito burocrático. Se pide que cambien un par de cosas y no pasa nada más. Es una forma encubierta de legalizar los transgénicos”, dice.
A favor. Pero el tema es controversial y hay opiniones divididas incluso a nivel mundial. Para Roberto Rosales, experto en biocultivos, los cultivos genéticamente modificados representan un aliado pues aseguran la disponibilidad de más y mejores alimentos para la población en el futuro. “Como un ejemplo, la papa tiene un componente que al momento de freírlas puede resultar cancerígeno. En un cultivo transgénico podemos quitar ese componente y hacer una papa mucho más saludable”, dice el experto.
Además dice que para los agricultores es una herramienta muy útil para proteger sus cultivos, disminuir costos de producción y aumentar el rendimiento de la cosecha. El ambiente se ve beneficiado al basarse un método de producción más sostenible.
Preocupación. Por otro la-do, Eduard Pinzón, miembro del colectivo Agroecológico del Ecuador, dice que existe un problema directo y otro indirecto. El primero sería las enfermedades causadas por el uso de transgénicos. Es el caso del cáncer, pues muchos estudios científicos ponen a estos organismos modificados como una causa para la enfermedad.
Además, el efecto indirecto se refiere a la pérdida de soberanía alimentaria, ya que estos cultivos transgénicos están diseñados a gran escala y son monocultivos. “Lo que hacen es desplazar a los alimentos. Es decir, donde se podía dar una diversidad de alimentos para el consumo local se desplazan por estos cultivos”, afirma.
En el caso de Imbabura. Pinzón comentó que uno de los cultivos más usados con transgénicos, a nivel mundial, es el maíz.
En Ecuador existen alrededor de 31 tipos de maíz de las cuales solo en Cotacachi existen 16.
“Con estos diferentes tipos se preparan los diversos platillos típicos como tostado, chulpi, tortillas, humitas, entre otros, y al desaparecer esa diversidad pues también se pierde esa diversidad gastronómica”, dice el experto y añade que “Imbabura en ese sentido es clave. En el caso de Cotaca-chi que tiene 16 tipos de maíz es considerado como uno de los lugares más diversos del país”.
No sería necesario. Andrés Simbaña, docente investigador de la PUCE-SI, comenta que desde la academia se impulsa la producción de alimentos de la zona. “Tenemos abundancia de cultivos que nos permite ser un país privilegiado para producir alimentos saludables”, explica.
El docente dice que los cultivos transgénicos se dan en otros países para aprovechar la industria a pesar de que existen estudios que no los recomiendan, sin embargo, en el caso del Ecuador se pueden producir gran cantidad de alimentos y de muy buena calidad.