Avanzan trabajos de recuperación en la Piscina Olímpica de Ibarra
Ahora sí, la recuperación de la Piscina Olímpica de Ibarra ya es una realidad. Los trabajos iniciaron y de a poco este importante escenario de la provincia de Imbabura empieza a cambiar y a tener una nueva imagen.
En diciembre de 2019, la Piscina Olímpica, escenario que en ese momento estuvo administrado por la Federación Deportiva de Imbabura (FDI), cerró sus puertas a los nadadores locales, a otros deportistas y al público.
Han pasado un poco más de dos años del cierre y tras los reclamos de varios deportistas, principales perjudicados por esta medida, los trabajos avanzan y la reapertura cada vez está más cerca. Todo esto, debido a la decisión que tomaron desde la Prefectura de Imbabura, institución que, al momento, tiene el control de las instalaciones.
“Estamos haciendo la rehabilitación de la Piscina Olímpica. Nos encontramos trabajando en todo lo que tiene que ver con la limpieza de la piscina. Estamos blanqueando las paredes y sacando todo el sarro que tiene”, mencionó Ramiro Tapia, ingeniero imbabureño que está al frente de los trabajos de recuperación que se realizan en este escenario. También explicó que, como parte de las labores, pintarán tanto el exterior como el interior de este espacio acuático.
La parte eléctrica es clave. Por ese motivo: instalarán cableado y varios puntos de iluminación.
Además, están realizando el respectivo mantenimiento a los calderos, filtros, bombas y toda la tubería que tiene la piscina.
A finales del mes en curso, según el profesional a cargo, esperan entregar terminada la obra.
La temperatura del agua es fundamental para que los nadadores puedan cumplir con sus prácticas de la manera más óptima. Sobre esto, Tapia dijo que la idea es dejar entre 26 y 27 grados centígrados la temperatura del agua.
Santiago Nicaragua, un exnadador imbabureño y actual entrenador de natación, ve con buenos ojos que, en varias semanas, la Piscina Olímpica pueda volver a entrar en funcionamiento.
En diálogo con Diario EL NORTE, Nicaragua pidió que la institución que se haga cargo de este espacio acuático garantice que no se vuelva a cerrar.
También mencionó que el horario de atención debe extenderse para que, al menos, los nadadores locales puedan entrenar mínimo dos horas diarias. Si todo eso se da, el entrenador aseguró que en uno o dos años el nivel de natación en esta parte del Ecuador tendría un importante crecimiento.
“La rehabilitación de la Piscina Olímpica es algo necesario para el desarrollo de la natación. Siento satisfacción al saber que la van a recuperar, pero lo que si quiero pedir a las autoridades es que la piscina se la mantenga abierta todo el día”, mencionó Óscar Jara Andrade, uno de los mejores triatletas de Imbabura.
“Espero con ansias la reapertura de la Piscina Olímpica”, el joven deportista local.